Claro es, que todos somos diferentes, con distintas características físicas, distintas habilidades, distinto carácter, distintas limitaciones, también es claro que no siempre nacemos en donde deberíamos (o nos hubiera gustado) nacer; incluso hay personas que nacen adelantados a su tiempo; esto ocasiona que no siempre se pueda ejercer todo el potencial para lo que fuimos creados, o hacer todo para lo que estábamos predestinados...
Pero en la mayoría de los casos el vivir sintiendo que estás fuera de lugar, que nadie te comprende... Y en el peor escenario, el vivir discriminado.
El Giraluna es una bonita historia que nos cuenta que no todo está perdido y que si no nos atrevemos a cambiar, en ocasiones el destino se encarga de mostrarnos el camino, solo no debemos tener miedo de ser nosotros mismos.
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